Conocé qué provincias están afectadas, cómo se determina este tipo de alerta y qué cuidados conviene tener. Provincias afectadas: Salta, Catamarca, Tucumán, La Rioja, San Juan, Córdoba, San Luis, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos, Corrientes.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta amarilla por frío extremo que afecta a 16 provincias, incluida Buenos Aires, para este sábado 28 de junio.

“Este tipo de alertas pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como niños y niñas, personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas», detalla el SMN.
Provincias afectadas: Salta, Catamarca, Tucumán, La Rioja, San Juan, Córdoba, San Luis, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos, Corrientes.
Alerta por frío extremo en el AMBA:
Esta alerta no rige en Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).
¿Cómo se determina la alerta por frío extremo?
El SMN analiza variables como:
Las temperaturas mínimas pronosticadas.
La persistencia del frío (varios días seguidos).
La comparación con valores habituales de la época.
El impacto histórico de temperaturas similares en la salud pública.
Recomendaciones del SMN ante una alerta por frío extremo
Frente a las bajas temperaturas extremas, el SMN emite recomendaciones para la protección de la salud y seguridad de la población.
1- Protección personal:
Ropa adecuada: usar varias capas de ropa, en caso de ser posible, de materiales aislantes como lana y tejidos térmicos. Cubrir bien las extremidades: manos, pies, cuello y cabeza.
Uso de guantes, bufandas y gorros: estas partes del cuerpo son las más susceptibles al frío, por lo que deben estar cubiertas.
Calzado cerrado y abrigado: asegurate de que el calzado sea impermeable y aislante, al evitar que tus pies se mojen o enfríen.
2- Cuidado con las enfermedades respiratorias:
Evitá la exposición prolongada al frío, sobre todo si padecés enfermedades respiratorias como asma o bronquitis.
Si es necesario, utilizá mascarillas o bufandas para cubrir la boca y nariz al salir al exterior, y evitar inhalar aire frío de forma directa.
3- Mantenerse en lugares cerrados y abrigados:
Limitar el tiempo de permanencia al aire libre. Si es inevitable salir, realiza actividades físicas ligeras para mantener el cuerpo en movimiento y generar calor.
En casa, asegurate de que las ventanas y puertas estén bien cerradas. Utilizá calefacción, pero con precaución para evitar intoxicaciones por monóxido de carbono.
4- Precauciones con niños y personas mayores:
Niños y ancianos son más vulnerables al frío extremo, por lo que se recomienda mantenerlos abrigados en todo momento y evitar que permanezcan en ambientes fríos por períodos largos.
Controlar la temperatura interna de las viviendas, sobre todo en lugares donde residen personas con movilidad limitada.
5- Evitar actividades en el exterior durante las horas de mayor frío:
Evitar realizar deportes o actividades físicas intensas al aire libre durante las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde, cuando las temperaturas son más bajas.
6- Hidratación y alimentación:
Aunque el frío puede reducir la sensación de sed, es importante mantenerse hidratado, ya que el aire frío también puede deshidratar el cuerpo.
Ingerir alimentos calientes y de fácil digestión, que ayuden a mantener la energía y la temperatura corporal.
7- Cuidado con la formación de hielo en calles y caminos:
Prever el uso de cadenas o neumáticos con clavos si se tiene que transitar por zonas con nieve o hielo.
Tener precaución con el hielo que puede formarse en veredas, puentes o caminos, ya que aumenta el riesgo de caídas y accidentes.
8- Revisión de equipos de calefacción:
Asegurarse de que los sistemas de calefacción funcionen bien y sin riesgo de generar monóxido de carbono. No utilizar braseros o estufas a gas en espacios cerrados sin ventilación adecuada.
