Una mujer se comunicó con Radio Sudamericana para denunciar “agresiones físicas y verbales” por parte de un vecino de ella, quien vive en su mismo edificio. El conflicto habría iniciado por una pelea entre sus perros y terminó desencadenando una brutal agresión por parte de su vecino, un hombre de 35 años. “Me siento desamparada por la Justicia”, declaró la mujer, visiblemente angustiada.
Un violento hecho se dio el martes pasado en un edificio ubicado sobre calle Tucumán, entre 9 de Julio y Junín de la capital correntina.
Una mujer, identificada como Mariana, se comunicó con Radio Sudamericana y denunció un violento hecho que involucró a dos de sus vecinos directos.
“Por lo general, a la noche saco a mi chihuahua solamente a la cochera de mi edificio. Como todas las noches, lo saqué para que se pueda recrear y haga sus necesidades. Por su parte, mis vecinos tienen una perra de la misma raza que el mío, pero ella suele morder a las personas y otros animales”, comenzó relatando la mujer.
“Mientras estaba en la cochera junto con mi perro, siento que la perrita baja y lo ataca al mío. En eso baja su dueño gritándole a ella para separarlos. Cuando se acerca, le pega una patada a mi perro y lo hace volar hacia un costado. En ese momento me comenzó a insultar, llegando a decirme que si lo tocaba a su perro ‘me iba a matar’”, contaba indignada Mariana.
“Esto pasó en el edificio pero sin vecinos alrededor. Cuando atino a alzar a mi perro, siento un rodillazo de esta persona y me tira al piso. Me comenzó a retorcer el brazo en el suelo y empecé a pedir auxilio, hasta que por fortuna un hombre que no vive en el edificio llegó para ayudarme”, declaró la damnificada en la comunicación.
Y prosiguió: “La muñeca la tengo con hematomas y mi brazo está completamente hinchado. Con respecto a la denuncia, lo que sí quiero dejar en claro es que tuve la suerte de que esta persona no cuente con un elemento contundente con el cual golpearme. Lo llevaron a la comisaría N°1 que es donde se radicó la denuncia, mientras el oficial a cargo minimizaba el caso. La respuesta fue que como no había médicos para ver mis lesiones, que me vuelva a mi casa. Pregunté si lo iban a dejar en libertad luego de lo que hizo, a lo que me respondió que por orden del fiscal no podían detenerlo”.
Por otra parte, Mariana destacó lo que más preocupada e indignada la dejaba de todo el caso. “Lo que quiero que se sepa es que, tras realizar la denuncia, me mandaron a mi casa a esperar a que el médico legal tome constancia de todo lo que me ocurrió mientras que a esta persona la liberaron”, destacó.
Y aclaró: “No me lo puedo cruzar porque la que está presa en estos momentos en mi departamento soy yo. Me mandaron custodia policial y por orden de un fiscal lo liberaron a mi agresor. No obstante, el padre de esta persona hizo una exposición en la comisaría N° 1 en donde alegaba un tratamiento psiquiátrico de su hijo. No sé si esto es verdad o es una forma de evadir responsabilidades”.
Y como último episodio violento de toda esta serie bastante angustiante, Mariana contó: “Ayer el padre de este hombre de 35 años ingresó a mi departamento de forma agresiva para obligarme a que retire la denuncia. La policía que me está custodiando tuvo que subir para reducirlo y llevarlo a la comisaría. La cuestión es que hoy estoy presa en mi departamento y estas dos personas están libres. Me siento desamparada. Hoy soy presa de toda esta gente”.
