Referentes del sector auguran un panorama complejo para el mercado de la carne vacuna en los próximos meses, con desafíos derivados tanto de la oferta, afectada por la sequía, como de los factores económicos que inciden en la capacidad de compra de los consumidores.

Luego del incremento abrupto registrado en diciembre, especialmente en torno a las fechas festivas, el precio de la carne vacuna evidenció un descenso importante en los últimos días. Sin embargo, pese a la disminución en los valores, las ventas no repuntan.
Hugo Lucena, referente del sector carnicero de Corrientes, compartió su preocupación al respecto. En declaraciones a la prensa local, expresó su inquietud por la abrupta caída en la afluencia de clientes, señalando que los precios cayeron entre 800 y 1000 pesos por kilo. Esta baja en los costos, sin embargo, no logró estimular la demanda, ya que los consumidores aún se muestran reacios a comprar. Sobre costos, Lucena detalló que aproximadamente las pulpas se encuentran entre los 5 mil pesos y 5200, costilla 3500, costeleta 3600, en tanto que cortes más económicos como la falda, aguja y la paleta se consiguen a 3300 el kilo, la carne molida 2800 pesos y el osobuco 2600.
