«Qué bueno es rezar con la Palabra, interpretar la Palabra, tener presente este desafío de fraternidad», reflexionó el episcopado al invitar a la jornada del próximo domingo, instituida por el Papa. Monseñor Adolfo Canecin, envío a todas las comunidades parroquiales, su estímulo y anima a esta celebración. Compartió material y subsidios litúrgicos, de organismos oficiales de la Conferencia Episcopal Argentina.
Este domingo 23 de enero, tercero del tiempo durante el año, la Iglesia celebra el Domingo de la Palabra de Dios, que recuerda la importancia y el valor de la Sagrada Escritura para la vida cristiana, dedicado a la «celebración, reflexión y divulgación de la Palabra de Dios». Será la tercera ocasión en que se celebrará este día instituido por el papa Francisco el, con la firma de la carta apostólica en forma de motu proprio Aperuit illis.
La intención especial de que todos los fieles en la Iglesia: laicos, consagrados, ministros y religiosos, realmente le demos lugar central a la Palabra de Dios escrita, a la Biblia, en nuestra espiritualidad.
“Dedicar concretamente un domingo del año litúrgico a la Palabra de Dios –explicó el Papa Francisco-, nos permite, sobre todo, hacer que la Iglesia reviva el gesto del Resucitado que abre también para nosotros el tesoro de su Palabra para que podamos anunciar a todo el mundo esta riqueza inagotable”.-