LA NACION realizó una recorrida nocturna por paradores y boliches; el furor por entrar a las discotecas más concurridas, videos de TikTok, y las excusas para salir que les dan a sus padres.
Un grupo de mendocinos había arrancado temprano en el after beach de Boutique. Reservaron las entradas con anticipación [eran gratis, pero había cupo]. Y llegaron antes de las 18 a la playa, frente al parador top de Pinamar, para escuchar al DJ del momento, Fer Palacios.
Se fueron molestos, como varios de los miles de adolescentes de entre 16 y 18 años, que esperaban más: “Era a las 18 y empezó tarde. Tocó nada más que 40 minutos. Y además liberaron la entrada. ¿Para qué nos hicieron reservar?”, se queja Nicolás. Tiene 17 y está con Guillermo, de la misma edad. Ahora son las 4 de la mañana. Intentaron otra vez ingresar a Boutique, que a la noche es boliche, pero rebotaron. Son menores