La próxima semana suspendería a 200 operarios.
La empresa controlada por el Grupo ArcelorMittal busca reducir costos ante la caída de la demanda y se anticipa a un posible derrumbe de las exportaciones.
La empresa siderúrgica Acindar, controlada por el Grupo ArcelorMittal, acordó con la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) la suspensión de 970 empleados de manera escalonada. Esta medida busca reducir costos ante la caída de la demanda y la producción y en medio de la reciente imposición de aranceles del 25% por parte de Estados Unidos a las importaciones de acero y aluminio que afectaría gravemente a la industria.
Según el acuerdo, los trabajadores suspendidos recibirán el 80% de su salario en febrero, el 78% en marzo y el 75% desde abril hasta diciembre de 2025. Paralelamente, la empresa logró las 200 adhesiones que buscaba con el plan de retiros voluntarios que puso en marcha a comienzos de enero. A su vez, mantiene la decisión de eliminar otros 200 puestos indirectos a través de la renegociación de acuerdos con empresas contratistas.
