LAS AUTORIDADES SIGUEN DE CERCA LA ALTURA DEL RÍO ANTE LA AMENAZA DE NUEVA CRECIENTE DURANTE EL INVIERNO.
Tras una lluvia récord en junio
El descenso del agua fue más lento de lo que se esperaba. Las autoridades de la provincia junto a los jefes comunales que tienen borde con este río miran de cerca el hidrómetro ante el temor nueva crecida. En la localidad de Santo Tomé, 18 personas volvieron a sus casas.

Luego de varias semanas de complicaciones por la creciente del río Uruguay, algunas familias correntinas comenzaron a regresar a sus hogares.
Son varios los puntos de la provincia que tuvieron complicaciones con las lluvias que se registraron en junio y parte de julio.
Las lluvias en las altas cuencas son un punto crítico en esta parte del continente sudamericano. Paso de los Libres, Monte Caseros, Santo Tomé, fueron algunas de las ciudades que padecieron las consecuencias de la crecida.
En la jornada de ayer algunos municipios comenzaron a ver una luz de esperanza para volver a la normalidad, aunque los intendentes están con la guardia alta ante el temor de nuevas subas en lo que resta del invierno y lo que pueda pasar con la primavera y el verano.
En este sentido, Pablo Verón, director de Defensa Civil de Santo Tomé, confirmó que el nivel del río Uruguay comenzó a descender, lo que permitió que las familias evacuadas por prevención comiencen a volver a sus viviendas.
«La buena noticia es que ya empezó una bajante importante del río Uruguay», señaló Verón, al tiempo que detalló que durante la última crecida fueron evacuadas 18 personas en total, aunque en su mayoría por razones preventivas, ya que el agua no había ingresado a sus hogares, pero las viviendas estaban en zonas de riesgo.
«Gracias a Dios, las familias ya están empezando a regresar. El comportamiento de la cuenca es de bajante en casi toda la región, lo que nos permite proyectar semanas tranquilas», agregó.
El funcionario también destacó que la represa de Chapecó, en Brasil, redujo considerablemente el caudal de agua que venía liberando, lo cual contribuyó a la estabilización del río en la zona.
Desde Defensa Civil mantienen el monitoreo constante, pero todo indica que la situación tiende a normalizarse en los próximos días, luego de varios episodios de alerta por crecidas en el litoral.
