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domingo, julio 6, 2025
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Sexualidad después de los 40: ocho claves para amar y disfrutar

El amor es una emoción que se vive en todas las etapas de la vida, no solo en la juventud. A medida que nos hacemos más grandes, nuestra percepción del deseo y la sexualidad evoluciona, adaptándose a nuevos ritmos y experiencias. Desafiar los estereotipos sobre el envejecimiento es clave para disfrutar de una vida plena y satisfactoria en todas sus dimensiones. En esta columna escrita por la Lic. Lorena M. Dávalos Espínola, Mgter. en Salud Sexual y Reproductiva para Sudamericana, te brindamos algunos tips para vivir y disfrutar.

En un mundo que a menudo parece obsesionado con la juventud eterna y los estándares de belleza impuestos por la sociedad, surge una pregunta provocativa y fundamental: ¿es posible amar y disfrutar de la sexualidad después de los 40? En este profundo análisis sobre el amor y la sexualidad en todas sus facetas, la profesional mencionó los mitos arraigados sobre la edad y el amor. 

¿Es posible amar después de los 40? ¿El amor tiene edades?, ¿Sólo se ama en la juventud? ¿El amor es una emoción que caduca…? ¿El amor es vintage.?

El amor es una emoción, que sentimos por muchas personas, no solamente por una pareja. Sentimos amor cuando somos niños por las personas que nos cuidan, por los animales, por los compañeritos del jardín, por mi amigo de toda la vida. Sentimos amor por nuestros hijos y por nuestros padres ya mayores, por nuestros nietos.

Sentimos amor por nosotros mismos, cuando nos aceptamos como somos, cuando vemos nuestros defectos y nuestras virtudes y cuando nos felicitamos por todo lo que pudimos, por lo que pudimos con esfuerzo; desafiándonos a nosotros mismos.

¡Entonces amamos todo el tiempo!… en todas las EDADES …. A los 20 y a los 30; a los 40,50, 60 y así sucesivamente.

Quizás nos cuesta pensar en nuestros cuerpos atravesados por los años, vivimos en la época de la eterna juventud, no toleramos las arrugas, el paso del año en nuestra piel, en nuestro cabello y por supuesto en todo nuestro cuerpo. Ya no tenemos las mismas energías o fuerzas porque es real el paso del tiempo, pero ganamos en experiencias, en conocimientos.

El concepto de belleza esta atravesado por un modelo social aceptado por muchos de ¿cómo debemos ser?, ¿cuáles son los cuerpos; los rostros y las personalidades válidas de ser deseables?

Entonces hay un mandato que me dice ¿a quién debo amar? Un modelo de belleza de ¿cómo deben ser los cuerpos deseables? Los cuerpos atravesados por los años, con arrugas ¿no deben ser amados?

El imaginario social piensa a los viejos en extremos opuestos: son asexuados o son perversos y asquerosos. Y con esta idea se recorta la dimensión del deseo y del amor. Acá la ignorancia juega un papel importante, todo lo que no se conoce científicamente, da lugar a un prejuicio. (Salvarezza)

Entonces surgen preguntas como: ¿disminuye la sexualidad con el curso del tiempo?, ¿los seres humanos se vuelven cada vez menos interesados sexualmente?, ¿debemos prepararnos para gozar menos de nuestra sexualidad a medida que envejecemos?

Es real que existen cambios fisiológicos a medida que las personas envejecemos, pero debemos saber que estos cambios fisiológicos no llevan, en sí misma, a que la función sexual sea afectada negativamente.

Se debe enfocar la sexualidad desde otra mirada, pasando del modelo de sexualidad basada en el joven donde se iguala sexualidad con coito a un modelo más real y permisivo del disfrute de todas las fases de la respuesta sexual humana y la búsqueda del placer.

El climaterio en la mujer trae los primeros signos evidentes de envejecimientos: arrugas, canas, perdida de la agilidad, debilidad ósea, flacidez de senos y nalgas, pueden hacer pensar a una mujer de 40 a 50 años que de ahora en más es incapaz de seducir o gustar a nadie. Existe un estereotipo cultural que la mujer y el hombre mayor son asexuados y a veces es una causa poderosa y frecuente para el abandono del erotismo. Pero los científicos Kinsey y Master y Johnson, confirman en sus estudios que no existe límite de edad para el ejercicio de la sexualidad.

Existe un mandato social que supone que las personas mayores no desean, no tienen sexo.

¿El amor y el deseo son solo genitalidad? Claramente que no, hay muchas maneras de amar y de transmitir el deseo, los besos son válidos, los abrazos, reconocer las diferentes zonas erógenas de cada cuerpo, de cada persona, cualquiera de ella, es capaz de desencadenar la respuesta sexual humana.

Debemos cuestionar esos mandatos de que los viejos no aman, no desean, no tienen sexo o no tienen genitalidad. Si bien el varón mayor de sesenta es más lento en su respuesta eréctil, tarda más en eyacular y el período entre erección y erección y entre eyaculación y otra; es más extendido,  lo concreto es que el varón de más de sesenta años demora más en excitarse y obtener una erección, pero cuando llega la puede mantener y deberá entender que en la sexualidad participa todo  su cuerpo erógeno, que su respuesta es diferente en calidad y cantidad pero que podría aprender a disfrutar mucho del camino y no solo el final del acto.

Pero es válido seguir amando, deseando y teniendo sexo, como se pueda, como salga, con besos, abrazos, caricias intimas.

Hay todo un universo de productos que van permitiendo mejorar la capacidad del disfrute, como cremas hidratantes y lubricantes para la mujer, como pastillas para una mejora en las erecciones para el varón, por ejemplo.

Hay que saber que la sexualidad es más que genitalidad, que el orgasmo no es lo más importante; que  la respuesta sexual humana es compleja e involucra además de los órganos genitales, la actividad del cerebro y del sistema nervioso central. Y que tiene fases y todas son especiales. La fase del deseo, tiene que ver con el estado de disponibilidad que tenemos hacia una actividad sexual. Tiene que ver con tener ganas, buscar, pensar en sexo, fantasear. Es la llamada fase psicológica; luego si esto continua aparece la fase de excitación, una respuesta biológica, donde el cuerpo con la estimulación adecuada se prepara para el encuentro sexual.

La fase orgásmica, la que para muchos es la frutilla del postre, a la que buscan llegar en una carrera desesperada, cuya durabilidad es de  entre 5 a 10 segundos… y se pasan de alto, sin la pausa que requieren las otras etapas.

Entonces empecemos a disfrutar cada momento, a desarrollar recursos, como las fantasías sexuales, las caricias intimas, el autoerotismo. En definitiva, la persona que tuvo una vida sexual plena y satisfactoria, querrá prolongarla en el tiempo mucho más que quienes la vivieron de forma restrictiva.

Quizás en esta etapa de la vida no se busca en el otro los músculos firmes, los cabellos brillantes y largos, ni las caras sin arrugas, ni las siluetas de los modelos de bellezas. Se busca amor, comprensión, afecto, compañía, solidaridad, contactos corporales, por que dos personas mayores que se encuentran en general tienen similares marcas en el cuerpo y en el alma.

Muchos científicos reconocen que la expresión sexual es más satisfactoria cuando existe intimidad emocional entre las personas involucradas. (Dr. Kusnetzoff). Disfrutemos cada momento de la vida, cada etapa tiene su belleza, su riqueza, la sexualidad no tiene edad, hay que vivirla cada momento en cada etapa de manera plena y satisfactoria.

No es indispensable ser joven para vivir la vida y para gozar de ella, basta con mantener activo el deseo, no importa los años que se tenga. Somos seres sexuados, nuestra salud sexual también es importante.

¿Y vos como vivís tu sexualidad?

Lic. Lorena M Dávalos Espínola|M.P. 261|Mgter. en Salud Sexual y Reproductiva | Instagram: @lorena.davalos

TALLER PARA PAREJAS

Si querés participar del Taller para Parejas «Cita a ciegas» que brindará Lorena, podés hacerlo este sábado 15 de junio de 9.30 a 11.30 horas en Brown 70, Resistencia. Disertarán, junto a Lorena Dávalos, la lic en psicología y especialista en sexualidad educativa, Marina Gómez Zeniquel.

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